viernes, 30 de noviembre de 2007

"La vida de los ex subversivos en prisión"

Ese es el título de un reportaje tema publicado hoy por el Centro de Investigación Periodística (Ciper) que dirigen John Dinges y Mónica González. Trata de tipos que fueron miembros de grupos como el MIR, FPMR y el Lautaro que tras descolgarse de sus organizaciones se dedicaron a hacer lo que en jerga militante se conoce como asaltos y robos "PT": "pa` tí" mismo.
"El fenómeno -escribe Cristóbal Peña, del Ciper- ha sido una constante desde el retorno a la democracia: mientras un equipo especial de policías busca desde hace días intensamente a los ex lautaristas que habrían dado muerte al cabo de Carabineros Luis Moyano, una quincena de ex subversivos cumplen penas por delitos comunes en la ex Penitenciaría de Santiago, la más poblada cárcel chilena. Aunque permanecen segregados, en condiciones de cuidado especial, se han organizado para proponer un alto al fuego a cambio de rebaja de penas".
Es un tema que estaba ahí dando bote y nadie lo había pescado.
Otro, relacionado lateralmente con el primero, es qué pasa con los ex presos políticos una vez que salen en libertad. Una vez me tocó entrevistar a uno de ellos, un lautarista. Era época de Navidad y el tipo, sólo, con una hija a cuestas, sin trabajo formal ni apoyo de su propio círculo, vendía panes de pascua en la calle. En ese período hasta antes de Año Nuevo tuvimos tres largas conversaciones. En la última de ellas me dijo que estaba desesperado. Que no aguantaba más la miseria. Su hija se había enfermado y el hombre, que rozaba los 26 años de edad, no tenía un peso para comprar remedios. En su urgencia por conseguir plata había ido a vender sus panes a una sucursal bancaria.
-En cinco minutos ya sabía la cantidad de guardias y dónde guardaban la plata. Con todo lo que aprendí en el "Laucha" no me hubiese costado nada asaltar el banco. Pensé en mi cabra chica y te juro que estuve a punto.
-¿Y por qué no lo hiciste?-le pregunté.
-Por lo mismo. Por ella-me dijo y se despidió.
Nunca más lo volví a ver.

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