Columna 6 Oh my blog! Completa

OH, MY BLOG!

¿Y TÚ NO TIENES BLOG? (Versión completa)

Por Miguel Paz

Felipe Lamarca no tiene blog aunque debería. Leer su entrevista en La Tercera y esa frase donde dice: “La gente empieza a tener la sensación de que permanentemente se la afilan”, fue como escuchar a Tomás Moulián recitando un párrafo de “Anatomía de un mito”. Ahora que tiene tiempo libre tras su renuncia a la dirección de empresas Copec por los manejos de Celco en Valdivia, Lamarca podría asistir a esos talleres para “powerfull people” que dicta el senador Fernando Flores. En una de esas se convierte en una versión chilena muy sui géneris de Michael Moore y pone su boca donde está su dinero, como dicen los gringos.

Una amiga está aterrada por el fenómeno de los blogs. Dice que se ha convertido en una cuestión tan ondera que si no tienes uno es como estar fuera. Y como ella se niega a subirse a la ola ha vivido más de un desaire por no hacerle “upgrade” al cuadernito donde escribe sus tribulaciones. Si a usted le pasa lo mismo y quiere entrar a la blogósfera pero no entiende ni jota puede ver este manual.

¿Pero, son tan relevantes para nuestra existencia los blogs?

En medio de la tragedia humana, los terremotos, huracanes, el aumento sostenido de la temperatura del planeta, la hambruna en África, la miseria a pocas cuadras de su casa estimado lector/a, la concentración de la riqueza y la concreción de monopolios u oligopolios y esa extraña sensación de que todo se está yendo al carajo; la respuesta es sí.

Gracias a ellos un ciudadano cualquiera salda cuentas con los poderosos del mundo. Gracias a ellos nos enteramos de lo que realmente ocurría en Londres y en la estación de Atocha en Madrid, después de los bombazos. Pudimos leer de primera mano los testimonios de las víctimas y ver el horror de los cuerpos despaturrados que por un vergonzoso acuerdo de “caballeros” (si la palabra se retuerce un poco y aplica) entre los megaconsorcios de TV y el gobierno de turno optaron por no mostrar, decidiendo qué era bueno para nuestros oídos y ojos. En el caso de la invasión o liberación de Irak, según quien le venda el hueso al perro, y mientras las tropas de Bush bombardeaban Bagdad, un misterioso bloguero tecleaba para quien quisiese leer, todo lo que veía desde su ventana.

A casi dos años de la ocupación de ese país, los soldados norteamericanos también han encontrado en los blogs una salida a sus miedos y a la angustia de que igual que en Vietnam algo no cuaja, los irakíes no están ni tan felices, ni tan liberados, ni mejor de cuando vivían bajo el yugo de Saddam. De eso y de cuanto extrañan a su familia, de los abusos de autoridad que ven o son obligados a ejercer, escriben.

El asunto es que ha todo esto se le ha dado en llamar periodismo “participativo” o “ciudadano” y no hay quien lo detenga. El modelo más clarificador es Oh My News, un periódico creado por un magnate coreano donde escribe quien tenga tema, no se dé autobombo y no mienta. Oh My News ya tiene 35 mil reporteros ciudadanos. Entre ellos una chilena, María Pastora.

También en el plano local aumentan las iniciativas de la misma índole.
Menciono dos: “El Morrocotudo”, el primer diario online chileno de participación ciudadana; y www.mallecoemprende2005.blogspot.com. Este blog incentiva a jóvenes y adultos de Angol para que tengan su propia identidad en internet y tengan voz en la red. Quién sabe si en algún momento sus miradas desde la empobrecida provincia cobren la misma vigencia que se le da a los comentarios de Lamarca en su cómodo retiro.

*Para recomendar blogs para esta sección escribe a ohmyblog@gmail.com