viernes, 4 de abril de 2008

John Dinges se refiere a la polémica por salmones e Hidroaysén

"New York Times: los hechos son los hechos". Así titula su columna el co-director de Ciper, y profesor de la Escuela de Periodismo de la Universidad de Columbia, quien analiza las reacciones del gobierno de Michelle Bachelet ante un editorial y un reportaje del diario más influyente de Estados Unidos. A Dinges también le llama la atención que los mismos que se enteraban de las verdades del Chile de Pinochet por los medios extranjeros, hoy pongan el grito en el cielo cuando esa prensa publica investigaciones que no los favorecen.

Puedes leer a John, un tipo que vivió en Chile y recorrió Latinoamérica como corresponsal del Washington Post, en El Mostrador. De paso te recomiendo darte una vuelta por el sitio web del Centro de Investigación e Información Periodística, que publica reportajes como el que destapó las millonarias irregularidades en el Registro Civil.

2 comentarios:

Luis Argandoña dijo...

"Y le llama la atención que los mismos que se enteraban de las verdades del Chile de Pinochet por los medios extranjeros, hoy pongan el grito en el cielo cuando esa prensa publica investigaciones que no los favorecen".

¿Qué tiene que ver una cosa con la otra? Que el NYT haya denunciado las torturas de Pinochet no significa que no se puedan equivocar o que sean el oráculo de la verdad y la sabiduría.

No es afortunado que la autoridad diga "no nos vengan a dar lecciones", pero eso no cambia el fondo del asunto.

No hay que ser un adalid de las represas o tener acciones en Colbún o Endesa, para darse cuenta que la editorial del NYT es de un sesgo completo y está escrito con las mismas (exactas) frases que ha ocupado el lobby internacional anti represas. De hecho la editorial se titula "Patagonia sin represas". Cuando Tokman dijo que la editorial parecía "publicidad", en los "facts" estaba más cerca de la verdad que de la ironía.

Facts? La editorial parte en el primer párrafo con una afirmación que es simplemente falsa o ridículamente exagerada: que Cochrane va a quedar "irreconocible" (falso) y que la Patagonia va a quedar mucho peor que irreconocible. Está claro que las represas van a tener impacto, pero esa afirmación es una distorsión lisa y llana.

No hay que embobarse con el NYT.

Miguel Paz dijo...

No significa que no se puedan equivocar. Tú lo has dicho. Pero la cita tampoco dice lo contrario estimado Luis.

Sobre tu suspicacia respecto al origen del editorial, te recuerdo que el medio es parte de un negocio editorial. Siguiendo tu argumentación, por muy NYT, no será el primero ni el último diario en editorializar amén de objetivos propios (por algo es el editorial, también). Parecía dictado por Robert Kennedy, me dijo Alfredo Sepúlveda ayer. Es probable.

La pregunta entonces es ¿y por qué no? ¿Acaso en los medios chilenos no hay conspicuos personajes que influyen en los editoriales también?

¿Por ejemplo, que César Barros llame a Tompkins (a quien no conozco y del cual prefiero no opinar) el "talibán verde" es un "fact"? No, es una op-ed que te busca convencer. Muy legítimo.

¿Que el mismo Barros escriba su columna de esta semana en Qué Pasa en su calidad de columnista y no de representante gremial de los salmoneros, lo invalida? Ese es un "fact", pero no invalida su posición porque tiene derecho de expresarla.

Concuerdo contigo. No seamos bobos, con ningún medio.