Los estudiantes de Derecho de la Universidad de Chile aprovecharon el formato del popular sitio de Internet Wikipedia para crear su propia base de datos, Wikiderecho (www.wikiderecho.cl). En el espacio, que se hace en base a los textos que aportan los futuros abogados, hay de todo: datos para los alumnos, bolsas de trabajo, etc. Pero lo más comentado es el detallado apartado dedicado a los profesores, examinados con lupa por sus agudos pupilos. Algunos ejemplos. Alfredo Jocelyn-Holt: profesor de Historia institucional de Chile. Sobrenombres: “Mártir”, “Ventilador”, “Peluche Dueñas”. Sus clases: “Son muy voladas, piensa en voz alta y cuenta las ideas de sus libros ya escritos”. Entre sus frases destacadas están estas perlas: “Yo creo que los militares ladran”; “Yo detesto a don Andrés Bello, ¡encuentro que es un cabrón!”; “¿Por qué la derecha es igualitaria?... porque los costos bajan y las utilidades suben”; y varias otras dedicadas al rector de la Universidad Diego Portales, Carlos Peña, a quien, explican los estudiantes, Jocelyn-Holt odia “porque éste fue el responsable de su expulsión de la UDP”. "¿Cómo el mestizo se vuelve blanco? Es como Carlos Peña vistiéndose de Polo de arriba a abajo", es una de ellas.
Los jóvenes también le dedican un espacio a Peña, abogado y columnista dominical de “El Mercurio”, quien tiene cátedra de Derecho Civil en la “U”. Lo apodan “Peñita” o “El opinólogo del Derecho”; dicen que se ensaña con sus alumnos, tildándolos de “borregos” y tratándolos como “una manga de renacuajos prehistóricos incapaces de hilvanar dos ideas razonables”, aunque a renglón seguido reconocen su “absoluta claridad”. Sus clases, aseguran, “son refinadas y elegantes, pero muy fáciles de entender”; y advierten a los no iniciados que “en absolutamente todas sus columnas o referencias a la sociedad, comienza haciendo una distinción entre lo público y lo privado”.
Otro perfil que hay que leer sí o sí es el de Miguel Soto Piñeiro, profesor de Derecho Penal, quien se lleva una de las descripciones más largas y divertidas del sitio. Lo apodan “Guatón Soto”, “Maestro”, “Gordito” y “Brutus”; lo describen como “un jurista de peso y de inagotable apetito y sabiduría, famoso por sus inolvidables carretes de fin de ciclo”, y bromean con que “se corcheteó el estómago y no le resultó”; o que “una vez, en plena clase, quemó un Código Penal para ilustrar el delito de incendio”. Además de ser señalado como fanático del comic y asiduo televidente de programas faranduleros y la teleserie de moda, el humor de Soto Piñeiro es tan "hardcore" que a veces suelta brutalidades que harían palidecer a una feminista moderada, provocando carcajadas de su auditorio, como: "Las mujeres tienen un doble placer conmigo. El primero es durante el acto sexual mismo, el segundo cuando salgo de encima de ellas"; "Si la violación es inminente, relájese y disfrute". Y eso que a veces, dicen sus estudiantes, le gusta hablar como niño ("Shi, shi, shi", "Ño, Ño, Ñooo", "Shi she...", "A cheye peta". Como el alumno no comprendió, lo repitió, hasta que los que estaban sentados junto a él le señalaron que tenía que cerrar la puerta").
No hay comentarios.:
Publicar un comentario